El 1 de octubre de 1990, Luis Chavira Alva llegó al Auditorio Roberto Amorós (ubicado en la calle Sor Juana Inés de la Cruz 114, colonia Santa María La Ribera) con la convicción de que cada día hay una batalla que se tiene que librar en el ámbito de la cultura para lograr una transformación profunda del ser humano, a través del teatro, la danza, la música y de las artes en general.
Han pasado casi 24 años desde ese día y el Maestro Chavira sigue creyendo en la cultura como el motor del hombre. El próximo viernes 26 de septiembre, al finalizar la función de El amor de las luciérnagas se le realizará un reconocimiento a través de una develación de placa, por su incansable y profesional trabajo al frente del hoy Teatro Sergio Magaña.