

La historia aborda la relación de dos niños que, a su modo y en su entorno, están solos: Javier, a quien ignoran por completo en su casa, y Mónica, una niña que vive con un padre alcohólico. A partir de un encuentro fortuito en un parque que ambos frecuentan, los dos se darán la oportunidad de compartir sus miedos, juegos y secretos, pero, sobre todo, la necesidad de saber que aún en la soledad se pueden encontrar amigos en quien menos se espera.