lán y Emma son una pareja de individuos realizados profesionalmente, con solvencia económica, viajes, fiestas y una realidad acomodada. Tienen todo lo necesario para dar el siguiente paso, volverse una familia. Con la llegada del nuevo integrante, descubren que los planes no existen, que todo lo que les contaron acerca de la maternidad y la paternidad es fraude y que lo único real es que se mueren de miedo, cansancio y ganas de recuperar lo que jamás volverán a tener en sus manos, su vida como la conocían antes de esto. En medio de la crisis más fuerte en su relación, descubren el amor incondicional, ese del que todo mundo habla pero nadie entiende hasta que esa personita agarra tu dedo por primera vez con su manita diminuta y te derrite el corazón. Descubren, también, que con la llegada del bebé, nacieron un nuevo hombre y una nueva mujer con los que tienen que aprender a vivir por el resto de sus vidas. Por qué ser madre y ser padre no es suficiente para ser felices si no lo son primero como individuos.