Es un proyecto coreográfico que surge del interés por presentar escénicamente, el potencial dramatúrgico que posee un retrato fotográfico. A partir de fotografías detonadas por sueños de los intérpretes, se “extiende” real y físicamente en escena, la acción, energía y emoción, que nos sugirieron esas imágenes bidimensionales. Una pieza que busca acercarnos a nuestros mundo onírico e inconsciente , y cuestionar nuestra certeza de lo definitivo e inmutable de la realidad que percibimos y de nuestra propia identidad.