El Coyul

Fechas: 

Del 7 al 17 mar

Horarios: 
jue y vie 20 h, sáb 19 h y dom 18 h
Costo(s): 
$184.00
Elencos
Compañía: 
Pelo de gato

Un monólogo nace en el teatro comunitario como una protesta por la vida, por las compañeras desaparecidas, por la tierra, por el ecocidio que ha irrumpido nuestra casa y por las comunidades rurales.

El Coyul cuenta las historias de hombres que trabajan la tierra y de mujeres que atizan el comal de un pueblo ubicada entre el istmo y la costa del estado de Oaxaca, perteneciente a la etnia chontal baja del municipio de San Pedro Huamelula.

La actriz coyuleña llevará de viaje a su pueblo natal, entre carcajadas sabrosas, añoranzas y lágrimas que se desbordan sin permiso. El espectador olerá la comida, vivirá un domingo de beisbol y misa en el pueblo, un miércoles de tianguis, sentirá el calor y se echará una coronita.


EL COYUL, DIÁLOGO CON LA MEMORIA, LA IDENTIDAD Y LA PROTESTA

Escrita por la actriz Esmeralda Aragón y dirigida por ella misma y Gustavo Martínez, la propuesta se presenta del 7 al 17 de marzo en el Teatro Sergio Magaña

En la puesta en escena El Coyul, la compañía de teatro oaxaqueña Pelo de Gato, un ojo al teatro y otro al garabato, ofrece al público un viaje de regreso a la infancia, al origen, al barrio, a la comunidad, ahí donde se nace y forma la identidad.

Escrita y actuada por Esmeralda Aragón y dirigida por Gustavo Martínez y la propia Aragón, El Coyul se escenifica del 7 al 17 de marzo, en el Teatro Sergio Magaña de la colonia Santa María La Ribera, como parte de la programación de la Dirección del Sistema de Teatros de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México.

La pieza teatral es un constante amanecer en un pueblito chontal de donde proviene precisamente Esmeralda Aragón –Huamelula, Tehuantepec, Oaxaca–, que se pinta de día, de noche, de fuego y añoranzas. Es una hamaca colgada, blanca como la Luna que sonríe en las noches estrelladas, para recordar cómo levitan las paisanas entre un árbol de almendra y una palmera.

“Se trata de un diálogo con la memoria, la identidad y la protesta”, define la actriz y dramaturga de la puesta en escena quien escribió dicho texto para hacer un llamado y reflejo de los problemas que viven los pueblos de Latinoamérica.

La propuesta consta de siete escenas, a manera de los siete días de la semana en la vida en El Coyul: desde un miércoles en el tianguis, un domingo en el béisbol, un día de fiesta, un día después de la tragedia, un día para recordar a quienes ya no están, “un día para recordar a las mujeres de esta localidad que han desaparecido”.

El Coyul nace de “la necesidad de sentirme cerca del lugar de donde soy, para afianzar mi origen, mi identidad. ‘Ahí mero tá enterrado mi ombligo’”, dice la actriz y directora.

“Nace en el calor y el sudor de los hombres que trabajan la tierra y de las mujeres que atizan el comal. También es una protesta por la vida, por las compañeras desaparecidas, víctimas de feminicidio, que también nos ha alcanzado, como el rimbombante término modernidad que se nos ha vendido a los pueblos originarios regidos por los usos y costumbres”.

La pieza –informa la protagonista– se estrenó en El Coyul, bajo la sombra de un árbol de cacahuananche, ante más de ochocientas personas que por primera vez veían y sentían teatro. “Mi pueblo: El Coyul, es una hamaca colgada en una orillita del Océano Pacífico”.

Desde su estreno, la puesta en escena ha recorrido 26 estados de la República Mexicana y se ha representado más de 120 veces. Ganó la convocatoria de Producción de Teatro en la categoría de Teatro Comunitario, Oaxaca, 2018, y ha formado parte de la programación del Circuito Nacional de Artes Escénicas 2021, Programación Artística Alas y Raíces 2021, Teatro a Una Sola Voz 2022. Festival de Monólogos-Ruta Norte, y de la 42 Muestra Nacional de Teatro 2022.

Participan en el montaje Sandro y Aldo Bustamante en la música original, Italivi Elorza en la voz y arreglos, Rafael Alonso en el diseño del ambiente sonoro, y Abraham y su grupo Los Chavos en la musicalización.