La puesta en escena narra los sueños, las oportunidades y las circunstancias que nos hacen tomar decisiones importantes, firmes; de una infancia llena de ilusiones y miedos, así como de la libertad de expresar nuestros deseos como medio para alcanzar la felicidad, aunque sea momentánea. Nos cuestiona acerca de lo que soñábamos ser cuando éramos niños con una interrogante voraz y contundente: ¿lo hemos logrado?
Bambis dientes de leche cumple 10 años de pasión y entrega
Antón Araiza protagonista una historia que mezcla infancia con fubol Con casi 200 representaciones, la propuesta develará una placa conmemorativa por su década de vida
Después del gran reconocimiento en diferentes espacios teatrales, llega una única función el jueves 20 de abril de la exitosa puesta en escena Bambis dientes de leche, autoría y actuación de Antón Araiza, al Teatro de la Ciudad Esperanza Iris de la Dirección del Sistema de Teatros de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México.
En Bambis dientes de leche suceden dos actos que marcan la vida del personaje central, ambos en la misma fecha: 1986, ya que mientras la selección mexicana perdía frente a Alemania en la ronda de penales y la fiebre pambolera aquejaba al país, el personaje del monólogo se encontraba en su fiesta de cumpleaños número 5. El suceso deportivo pasó a la historia de una nación, pero también a la de este hombre que trae a su presente los alegres y nostálgicos recuerdos de su infancia.
El montaje, de la compañía Ocho metros cúbicos A.C., propone un potente vínculo con el espectador con un uso mínimo de elementos escenográficos con una apuesta a la potencia actoral en una historia personal.
Bajo la dirección de David Jiménez Sánchez, Bambis dientes de leche hace referencias entre la cancha, el escenario y la vida misma. Se trata de una puesta en escena refrescante sobre la visión del ser humano, del individuo construyéndose al centro de la pasión colectiva.
La pasión y entrega que se le ha impregnado, ha permitido conquistar diferentes escenarios de la República Mexicana. Desde su estreno en diciembre de 2013 en el Foro El Bicho al día de hoy, ha tenido casi 200 funciones.
El actor aborda el escenario como el jugador a la cancha. Se crea una coreografía en un espacio en el que el mayor peso recae en el trabajo corporal, en la correcta ejecución de los pasos; se siente con intensidad así se gane o se pierda; en cualquier caso, logra que el corazón se estremezca.
“Habrá quien sostenga que el teatro y el futbol no tienen punto de encuentro, mi opinión, muy discutible, es que hasta ahora no había encontrado esas similitudes; la principal, el lograr congregar a esa cantidad de seres en un lugar y tiempo determinado para ser testigos de un acontecimiento vivo. El futbol y el teatro son algo único”, afirma Antón Araiza.
Antón Araiza egresó de Casa Azul, Artes Escénicas Argos. Ha participado en obras bajo la dirección de Claudia Ríos, Alberto Villareal, Hugo Arrevillaga y Boris Schoemann, entre muchos otros. Con sus monólogos ha formado parte de la programación del 10 y 17 Festival de Monólogos Teatro A Una Sola Voz, y también fueron seleccionados para participar en la 35 y 41 Muestra Nacional de Teatro. Entre las obras de su autoría están El futuro según Kun, Café desKfeinado y La fortaleza del Vicio.